Ante el actual
contexto que afrontan los argentinos a causa de la pandemia provocada por el
COVID – 19, FATCA le hace llegar a sus afiliados toda la información
pertinente, para así contribuir con el cuidado sanitario de todos y todas.
Desde comienzos
del 2020, Argentina y el mundo se han visto afectados por la pandemia que hoy
en día persiste y, más específicamente desde el 19 de marzo, en nuestro país,
las disposiciones en cuanto a las restricciones de circulación masiva han
sufrido diversos cambios.
Dichos cambios y
fluctuaciones en sus normativas han impactado directamente en la economía de
los trabajadores y trabajadoras, quienes estuvieron siempre sujetos a ellas y
recibieron los embates de una crisis inevitable en su contexto.
Si bien la
vacunación se ha intensificado significativamente en las últimas semanas con el
arribo al país de nuevas dosis incluyendo a grupos etarios por debajo de los 60
años, el problema sigue vigente, así como también las medidas que restringen la
circulación en la vía pública y ciertas actividades.
Estas medidas se
establecen dentro de determinadas estrategias específicas, evaluando las
particularidades de cada jurisdicción o departamento, la dinámica del virus y
el conocimiento adquirido acerca de las actividades de mayor riesgo.
Al día de la
fecha, el último DNU por parte del Gobierno Nacional habilitó la circulación
para los fines de semana, permite la actividad social en espacios al aire libre
y retoma la presencialidad en los colegios de aquellos distritos con una
circulación viral más estable. Esto permite que se reabran algunas industrias y
renueva las esperanzas.
De todos modos,
la pandemia aún no terminó y ante el adverso panorama que atraviesa el país,
desde FATCA tenemos el deber de seguir haciendo hincapié sobre los cuidados
necesarios para impedir la transmisión del virus. Es fundamental cumplir con
las normativas vigentes y llevar a cabo todos los consejos sanitarios por parte
de las autoridades de salud.
Es fundamental
mantener la distancia de dos metros con otra persona, usar barbijo, lavarse las
manos con frecuencia, ventilar los ambientes con aire cruzado, no compartir
vajilla ni mate, estornudar sobre el pliegue del codo y, sobre todo, evitar las
reuniones sociales en espacios cerrados.
También es de
suma importancia reconocer los síntomas, como fiebre superior a los 37,5°C,
tos, dolor de garganta, dificultad respiratoria, rinitis, dolor muscular,
cefalea, diarrea y/o vómitos y pérdida de olfato y gusto. Junto a su
reconocimiento, se debe realizar el aislamiento correspondiente y la posterior
consulta al sistema de salud.
Es imprescindible
seguir en el camino de la recuperación y no bajar los brazos en esta lucha tan
importante que nos ha puesto a prueba a todos y todas. Los trabajadores son el
motor de la industria y nos necesitamos más sanos y fuertes que nunca, en pos
de salir adelante. Ya lo hemos hecho y lo haremos una vez más.